Reconozco que no lo ví. Pero porque me daba vergüenza ajena ya la promoción de la serie. Pero por lo que veo en las críticas, más de lo mismo. En España, por mucho que a alguno le duela, sólo se nos dan bien las charlotadas. Si nos salimos de los Torrente, Manos a la obra, Aída, y toda la filmografía de José Luis López Vázquez, Juanito Navarro, Pajares, Esteso y Ozores, no somos nada.
Se me ponen los pelos de punta de pensar en la pose del Puigcorbé imitando al Rey, igualito que Don Pimpón, o la Salamanca, creyéndose casi Ava Gardner. Dios, qué esperpento. Lo del extraño acento francés de la Paredes ya no me sorprende, porque el problema de esta señora es más cultural, de no saber dónde está Francia ni Grecia.
Eso sí, a la hora de pedir subvenciones a su amado PSOE, bien que afinan estos impresentables.
De la Tele paso, perder el tiempo, no es lo mío, leer es mí pasión. Pero entraba a la habitación y mí hijo se había dejado la tonta puesta, la imagen que vi, me dejó casi tiesa, tengo aún ese poder asombrarme y lo que vi fue para tirarse al suelo (Si hacerlo pudiera)invalidez impide, aquella mesa de camilla, con los cuatro cariacontecidos, todo tan sencillo, daba penita pena, vamos como para exportarlo, marisa Paredes, toda ella angulosa caracterizando la redondez de la reina, esos ojos verdes, igualicos a los de la mencionada, ese Juanjo tan monárquico, tan mal le salio el papel, que por mucho que se queje, vivo está, y en la intimidad se preguntara ¿como he estado yo para hacer esta fantochada?, no se salvo ni el apuntador, y repito tan solo vi una sola escena y algún Spot de los que pone en la publicidad, el único que se salva de la cadena Pasa Palabra. Ni Paredes, ni Juanjo son dos pipiolos, sabían muy bien lo que leían, los medios de los que disponían, en fin una caricatura hortera, el culebrón Sisi, había paisajes,palacios, y demasiada miel, cuando todo en ella fue hiel, Leti tiene que estar subiéndose por las paredes, ella siendo criticada por toda su España de la que cree que va a ser la reina del Chanteclec. El rey y su campechania...,cuando no le queda más remedio, como el que acuño aquello del juancarlismo, del que estamos (casi) todos hasta la peineta. Se imaginan lo que diran desde la burguesía catalana, y esos naciona-listos, que tan mal se han llevado siempre con el Borbón. En fin de anacronismo en anacronismo, nos estamos quedando a los pies de los caballos y sin un duro, por que habrá que comprar un atrezzo a telecinco...
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